Se lidera con el ejemplo.
En buena medida las personas aprenden por imitación y repetición. Si el líder tiene un comportamiento marginal o mediocre, el colaborador tendrá como patrón o referencia de conducta, la actuación de su superior, de tal forma que lo que es bueno o permitido para su jefe también será para el de rango inferior. En situaciones laborales, es frecuente comprobar que los colaboradores copian los hábitos de trabajo de su líder. De modo que, si el líder desea, por ejemplo, que el personal sea puntual, es necesario que él modele esa conducta. Es muy difícil persuadir a los colaboradores a que hagan lo que nosotros no hacemos. El ejemplo se convierte en un referente que se multiplica en los seguidores.
El reflejo del líder
No se puede aspirar ni es conveniente que los colaboradores sean una copia de sus líderes. Además, es imposible conseguir que un grupo de colaboradores sea lo que es su líder. Pero si es importante entender que los líderes necesitan hacer aquello que quieren ver como comportamiento en sus colaboradores. Los líderes marcan pautas, estándares y expectativas de comportamientos para su equipo con su propio comportamiento. El camino del cambio comienza con líder. Éste debe ser el primero en predicar con el ejemplo y llevar a cabo aquellas conductas que desea observar en el equipo.
Modelaje y congruencia del líder
Los líderes son modelos de conducta y actitud para sus colaboradores, lo cual demanda de ellos congruencia entre lo que dicen y lo que hacen. En todo caso, las acciones hablan más elocuentemente que las palabras. El líder necesita dar el ejemplo de la conducta que espera de sus colaboradores, lo que garantiza la autoridad moral para exigir a los demás lo que se modela.
A su vez el modelaje correcto genera relaciones de confianza y respeto, porque la congruencia del líder (correspondencia entre lo que se dice y se hace, y la consistencia en su accionar) genera la confiabilidad necesaria para que los supervisados se sientan en un ambiente de estabilidad y confianza, porque se percibe que el líder cumple sus compromisos y es predecible en su conducta, vale decir, los colaboradores saben que esperar del líder, eliminando la incertidumbre y la tensión de las relaciones.
¿Cómo modelar?
- Actué conforme lo que dice.
- Planifique las conductas a modelar. Ni improvise.
- Modele sistemáticamente. Sea consistente.
- Modele conductas con consecuencias positivas.
- Refuerce, reconozca y recompense las conductas imitadas.
Para reflexionar:
- ¿De qué forma modela usted para sus colaboradores?
- ¿Se considera un ejemplo a seguir?
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