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Crisis: Peligro u oportunidad

En chino la palabra crisis se traduce como (Wei Ji). En chino esta palabra está formada por dos caracteres. El primero es Wei, que significa peligro y el segundo es Ji, que significa oportunidad.

Sin duda alguna vivimos en una era de muchas complejidades y dificultades; pero como dicen los chinos:

«Crisis y dificultad es sinónimo de oportunidad».

La situación de crisis es como una moneda de dos caras: dificultad y peligro vs oportunidad

Creo que es un asunto de enfoque. Si hacemos énfasis en los peligros, la amenazas y las dificultades, probablemente nos sentiremos abrumados; pero si vemos las crisis como una posibilidad / oportunidad, nos sentiremos animados y motivados a emprender / hacer.

Cada crisis o circunstancia adversa tiene dos caminos sobre cómo actuar:

(1) Convertirse en un problema y perjudicarnos por no saber o no querer hacer algo para superarla, o

(2) Aprovechar la circunstancia para crear, madurar, crecer, inventar soluciones.

La historia de la humanidad ha comprobado en forma ejemplarizante esta tesis. En todo caso, la perspectiva, actitud e intencionalidad con que se maneja la crisis, afecta en forma importante el resultado final en nuestra vida en particular.

Las crisis son una oportunidad para crecer / o para menguar

Las crisis no necesariamente forman nuestro carácter, pero la forma cómo decidimos enfrentarlas, la manera como reaccionamos, sí edifican nuestro carácter: débil o fuerte, integro o con doblez, verdadero o falso. En todo caso, la forma cómo reaccionamos ante las circunstancias, nos permite tomar conciencia sobre el tipo de persona que somos.

Lo cierto es que como decía Renny Yagosesky:

«Cada crisis es una invitación a ingresar en el maravilloso mundo de las infinitas posibilidades».

Ahora, las crisis tienen el potencial de permitir que salga lo mejor o lo peor de cada uno de nosotros.

Honoré de Balsac lo decía de la siguiente manera:

«En las grandes crisis, el corazón se rompe o se curte“.

En todo caso, es nuestra actitud ante la crisis: cómo decidimos enfrentarla, lo que marca la diferencia. Podemos ver las crisis y las dificultades como una tragedia, o como una oportunidad para el crecimiento; al fin y al cabo, como dice Peter Senge: “Los retos son condiciones ambientales que regulan el crecimiento”.

La pregunta clave es: ¿Estás a punto de romperte, o a punto de germinar?

Crisis: ¿Circunstancias externas o estados internos?

Por otra parte, en medio de las crisis es que se pone de manifiesto nuestra madurez emocional: los recursos de afrontamiento que tenemos o no.

Las adversidades, las crisis y circunstancias difíciles de la vida, ponen de manifiesto nuestro real carácter, revelan lo que hay adentro; revelan también nuestras grietas y debilidades o nuestras fortalezas.

En todo caso, las crisis son un examen que nos permite tomar conciencia de cómo está nuestra gestión emocional, del tipo de actitud que tenemos, de los recursos psicológicos con que contamos para prevalecer o no.

A veces observamos las crisis y dificultades en el entorno, sin caer en cuenta que la crisis está en nuestro interior. En este caso, deberíamos preguntarnos:

¿La crisis está en el ambiente o en mis emociones y pensamientos?

“La crisis es una condición interna en que nuestro lenguaje, nuestro cuerpo y nuestras emociones están en crisis”.  

 Para reflexionar:

 

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