Creación de ambientes conversacionales de apertura y confianza

El líder como parte de su rol necesita propiciar la creación de ambientes conversacionales que creen el ambiente psicológico – emocional expansivo que favorezca el diálogo, la confianza y apertura de los colaboradores.

El líder entiende que, como lo expresa Fernando Castro Rovira:

“Gerenciar una organización es hacerse cargo de este sistema conversacional que construye espacios emocionales expansivos o restrictivos”.

Sin ese ambiente de confianza e intimidad, los colaboradores pueden percibir las intervenciones del líder como invasivas y amenazantes. Por otra parte, este tipo de ambiente contribuye al desarrollo del vínculo relacional líder – colaborador, lo que fomenta el entendimiento, la confianza y el alineamiento, que se traducen en una mayor apertura de la gente al dialogo, la retroalimentación sobre el desempeño, la asunción de la responsabilidad y el compromiso, etc.

Esto esquema contribuye, además, a disminuir las tensiones en la relación líder – colaborador, reduciendo en el proceso los conflictos y las resistencias a los cambios requeridos por la organización.

El éxito del liderazgo se apoya en la construcción real y efectiva de ese ambiente conversacional, que se traduce en la creación de redes conversacionales habilitadoras y empoderadoras.

Las buenas conversaciones son fruto de contextos (ambientes) – espacios emocionales enriquecidos

Las buenas conversaciones líder – colaborador y su contexto son inseparables. Las relaciones (su clima, su sincronía, su ritmo, su dinamismo, etc.) entre el líder  y el colaborador, no pueden ser entendidas fuera del contexto (tiempo, espacio, valores, normas, reglas, etc.) en que quedan organizadas, y donde tiene lugar y ocasión la relación.

Si el contexto es enriquecido con tiempo de calidad y atención, con espacios que coadyuven a  reforzar creación de la confianza y la apertura, con normas y reglas claras, con un conjunto de valores organizacionales que le den cohesión a las relaciones, en el contexto de una cultura organizacional de equipo, y con la aceptación y el respeto de ambas partes, aún con las diferencias existentes,  entonces la relación se hace efectiva para propiciar acuerdos, lograr el alineamiento organizacional; así como promover el aprendizaje, facilitar la toma de conciencia y la asunción de la responsabilidad por el colaborador. Por el contrario, de contextos empobrecidos, surgen los conflictos, el desalineamiento, los problemas de comunicación, etc.

Desarrollando la capacidad de conexión emocional con los colaboradores

Por otra parte, para lograr efectividad en sus conversaciones, el líder necesita desarrollar la capacidad de conectarse emocionalmente con la gente, para crear el ambiente psicológico (atmosfera, clima, contexto) que propicie la confianza y apertura. Este proceso requiere como requisito en el líder, del desarrollo de la conciencia y el conocimiento de sí mismo, de su espacio emocional (inteligencia intrapersonal); de sus habilidades y fortalezas, pero también de sus limitaciones.

El líder apoya a su equipo de trabajo desde la claridad y conciencia de sus procesos personales. Así evita proyectar, endosar, o transferir a sus colaboradores lo que es suyo (necesidades, deseos, etc.). Al mismo tiempo requiere tomar conciencia del estado emocional de sus colaboradores, de ahí la importancia del desarrollo de su inteligencia emocional (inteligencia interpersonal), lo que implica, entre otras competencias sociales: asertividad, empatía, comunicación interpersonal, negociación, gestión de conflictos, entre otras.

Practicando la confidencialidad y la discrecionalidad en las conversaciones

Otro elemento ligado a la creación de ambientes conversacionales de apertura y confianza, es la confidencialidad y discrecionalidad que el líder debe proveer a la relación líder – colaborador. Esto es indispensable para crear un contexto – entorno relacional seguro en el que la gente se sienta protegida – en intimidad y confianza. Para este fin, el líder necesita ser transparente y manifestar sinceridad, integridad y respeto.

Factores cruciales en la creación de un contexto conversacional seguro y empoderador

Aquí hay varios términos que requieren alguna definición operativa para ampliar su comprensión en el contexto de una relación líder – colaborador:

•  Intimidad: Se encuentra ligada a la libertad de revelar sentimientos, creencias, ideas y opiniones de una manera franca y libre, y sin temor o riesgo de ser criticado, juzgado, atacado, descalificado o que se sea indiferente a sus expresiones.
• Confianza: Se refiere a la seguridad, tranquilidad y libertad para expresar sentimientos, creencias, ideas y opiniones.
• Respeto :Se refiere a la consideración y valoración que le otorga a las opiniones, creencias, percepciones, estilo de aprendizaje y manera de ser de la persona.
• Sinceridad: Se refiere a la genuinidad, honestidad y franqueza con que se expresan las opiniones.
• Integridad : Se refiere a la confiabilidad que proyecta el líder y a la capacidad de ser predecible, como consecuencia de ser congruente en sus actitudes y comportamientos.

En el contexto de la relación líder – colaborador, la confianza, la intimidad, el respecto y la confiabilidad no se decretan, ni se exigen, ni se imponen. Por el contrario, se ganan. Tampoco se puede fingir, ni invocar cuando es requerida ante una circunstancia. Se pueden estimular y tomar el riesgo de concederlas y tomarlas, pero no se generan en forma automática.

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